Primer día de declaraciones por herejía en Almadén

Ruinas del Convento de Franciscanos, en el extrarradio de Almadén.

En la misa de la mañana del 4 de mayo de 1760 en la Parroquia de Almadén, después del ofertorio, se leyó el edicto de fe y se conminó a los vecinos a denunciar a quien hubiese incurrido en herejía. A la mañana siguiente, Juan Antonio Calero y Arcayos –presbítero de Almadén- compareció en la casa que tenía la Inquisición para declarar sobre algunos capítulos del edicto publicitado el día Seguir leyendo …