Hace unos años, tuve el privilegio de reunirme con Isidro Zapata, vocal de la cofradía de la Soledad o Vera Cruz de Calzada de Calatrava. En aquel entonces, acababa de publicar mi primer volumen de «Calzada de Calatrava y su historia», el cual Isidro había comprado y disfrutado profundamente. Su entusiasmo por mi obra nos llevó a discutir la posibilidad de crear una organización sobre historia en Calzada de Calatrava, dedicada a informar y ofrecer charlas sobre la rica historia de nuestra localidad y de España, con la condición de que no dependiera de ninguna organización política. Meses después, recibí un mensaje de audio vía Messenger de Facebook del Presidente de la hermandad, Jesús González Ruiz. En él, Jesús me invitaba a reunirnos para hablar sobre la Hermandad de la Virgen de la Soledad. Habían lanzado una nueva página web destinada a informar a los calzadeños sobre esta cofradía y buscaban enriquecer su contenido con información detallada.
La reunión con Isidro y la propuesta de Jesús despertó en mí una curiosidad insaciable por las Cofradías de Calzada de Calatrava. Comencé mi investigación con la documentación sobre las hermandades existentes durante el censo de la Ensenada. Más tarde, en la biblioteca pública de Ciudad Real, encontré un libro con transcripciones de las cofradías de todos los pueblos de Ciudad Real, recopiladas por orden del conde de Aranda, y que se encuentran digitalizadas en el Archivo Histórico Provincial de Ciudad Real. Este descubrimiento me llevó a profundizar en la historia de las cofradías de mi pueblo, incluida la de la Soledad o Vera Cruz. La información que encontré era limitada, lo que me motivó a contactar con el archivo del arzobispado de Toledo. Para mi sorpresa, me confirmaron que tenían documentación relevante sobre las Hermandades de la Soledad o Vera Cruz, de la de Ntra. Sra. de los Remedios y del Salvador del Mundo. Solicité un presupuesto para la digitalización de toda esa información y, una vez obtenida la documentación, realicé la transcripción y la adapté al lenguaje actual. Esta valiosa información ha sido incluida en mi segundo volumen de “Calzada de Calatrava y su historia».
El lunes pasado, lunes santo, aproveché la ocasión de llevar ejemplares de mi segundo volumen a la papelería Castillo para reunirme con Jesús González Ruiz —presidente de la Hermandad—, Manuela González Lozano —Hermana Mayor— y los vocales Isidro Zapata y Luis Miguel López. Esta reunión tenía un propósito especial: quería ceder la documentación digitalizada que poseía sobre los estatutos de la cofradía, datados de 1745. La reunión fue muy enriquecedora. Charlamos sobre diversos temas relacionados con la historia y el pasado de la cofradía y el convento de los capuchinos, entre otras muchas otras cosas, y tuve la oportunidad de conocer los locales de la hermandad en el convento de San Francisco. Este encuentro no solo fortaleció nuestros lazos, sino que también reafirmó nuestro compromiso compartido de preservar y difundir la historia de Calzada de Calatrava. Durante la conversación, me informaron que Luis Miguel López, además de ser vocal, es informático y escritor, como yo, lo que añade un valioso conjunto de habilidades a la hermandad.
A última hora, sin que aún lo conozcan los miembros de la hermandad, tuve la idea de ponerme en contacto con Cristian Bermejo Rubio, archivero diocesano de Toledo y doctor en Historia. Le escribí un correo electrónico para que me informara si la documentación que me enviaron a mí, con marca de agua, podría ser enviada a la hermandad sin marca de agua para que la tuvieran en su archivo. La respuesta fue afirmativa, lo que abre una nueva puerta para enriquecer aún más el archivo de la cofradía.
Finalmente, quiero expresar mi más sincero agradecimiento a los miembros de la hermandad por la cálida acogida que me brindaron. Aquí estoy para lo que necesiten y seguiremos en contacto para continuar trabajando juntos en la preservación de nuestra historia.