El voluntario Realista García de la Parra

La milicia de voluntarios Realistas es creada mediante la orden de 10 de junio de 1823, a comienzos de la década ominosa tras el trienio liberal. La dirección de este cuerpo no recae sobre el ejército, debido a la desconfianza de Fernando VII en el ejército español, y va a servir como una defensa de la monarquía absoluta, por lo que el rey va a cuidarla mucho.