Francisco Javier MONGE FONT
Por circunstancias de obtener plaza como Profesor de Matemáticas en el Instituto de Bachillerato “Eduardo valencia” hoy I.E.S. de Calzada de Calatrava, en el curso 1979/80, se me pide una colaboración con motivo de su CINCUENTA ANIVERSARIO, lo que es un motivo de satisfacción, pues todos los que de una forma u otra hemos estado en dicho CENTRO, formamos parte de su Historia.
Empezaré contando que en septiembre de 1979 llegamos a Calzada mi esposa María del Pilar y yo. En el curso 1985/86 cambié de destino a Ciudad Real al Instituto “Santa María de Alarcos”, aunque durante dicho curso mi residencia seguía estando en Calzada, pues mis dos hijas seguían escolarizadas. Ya en septiembre del año 1986 abandonamos el pueblo, al que llegamos dos y partimos cuatro.
Durante el curso 1979/80 desempeñé las funciones de Jefe de Estudios, en el curso 1980/81 el de Secretario, donde devolví a sus titulares libros de calificaciones de Bachiller Elemental que tenían depositados en el Instituto, por aquello de aumentar el número de matriculados, aunque dudo que asistieran a clase pues algunos ya tenían su profesión, después otra vez Jefe de Estudios.
Siempre que en una población se inaugura un Instituto, marca un hito histórico para la vida cultural de todos sus vecinos y poblaciones aledañas. Y ahora en este ANIVERSARIO, ya pasado, significa un respaldo más que simbólico, a la ACCIÓN de unos hombres y mujeres al servicio de los intereses culturales de la Población y de España en su conjunto, iniciaron en el año 1970.
Como Jefe de Estudios podría contar muchas anécdotas, pero ciñéndome al cargo, procuré, que el Centro estuviera abierto a todos, en el que el alumno, que es el que le da su razón de ser, fuera el protagonista, pues en esos años de estudios tienen que decidir su futuro.
Estoy convencido de que todos los profesores hemos buscado el progreso de nuestros alumnos, progreso que se manifiesta en un hacer más y mejor, a todos ellos mi profundo agradecimiento.
Ahora que mientras escribo estas letras, he dejado volar la voz de mi reconocimiento, mis sueños y mis deseos, acabaré agradeciendo al pueblo de Calzada de Calatrava en su conjunto el acogimiento de que fuimos objeto y a los alumnos con los que compartí esos años, (con muchos aún sigo teniendo relaciones de amistad), deciros que habéis sido el soporte sobre el que se ha asentado mi trabajo. GRACIAS A TODOS.